Lawn Tennis retuvo la 3ra. plaza del Nacional de Clubes

Lawn Tennis se lo dio vuelta a La Tablada en la última jugada y salvó el cupo del NOA.
Parecía que ya estaba todo dicho en el Parque 9 de
Julio: La Tablada, el que había perdido todos sus partidos en el Nacional de
Clubes, vencía por cinco puntos de diferencia a Lawn Tennis cuando faltaban
segundos para el final del duelo que sentenciaba cuál de los dos perdía la
plaza para su región en la edición 2017. Más de uno se agarraba la cabeza al
ver cómo se escapaba un partido en el que los “Benjamines” aparecían como
banca, por ser locales y porque habían mostrado mejores argumentos rugbísticos
que el equipo cordobés. Pero la última pelota vale lo mismo que cualquiera, sólo hay
que saber usarla. Y el “Tennis” lo hizo bien: empujó hasta la puerta del ingoal,
aseguró el line (formación que le presentó algunos problemas, sobre todo al
principio), abrió hacia el centro de la cancha y Domingo Miotti tiró el rastrón
sutil y exacto a contrapierna de la defensa, para que Lucio Juárez Chico
entrara como colectivo sin frenos y anotó el try bajo los palos. La conversión
dio vuelta un resultado que durante prácticamente todo el partido había estado
en manos de los azulgranas, y salvó la tercera plaza del NOA, que el año pasado
había conseguido Cardenales. ¿Por qué tuvo que sufrir tanto Lawn Tennis? Porque, como
tantas otras veces a lo largo del torneo, le puso un moño al primer tiempo y se
lo regaló a su rival. Cuando tuvo la pelota abusó del juego con el pie, y
cuando no la tuvo se aburrió de cometer penales en defensa. La Tablada no tardó
en darse cuenta que el negocio no estaba por vía terrestre, sino por aire, así
que intentó siempre a la H, ya sea con penales o con intentos (fallidos) de
drop. Cinco aciertos del apertura Gabriel Roldán dibujaron el parcial de 15-3. Lawn Tennis necesitaba un lavado de cerebro y lo tuvo. Dos
tries en ocho minutos del complemento, por obra de Nicolás Cipulli y Fernando
Jogna Prat, lo devolvieron al partido, pero no tardó en desinflarse de nuevo.
Al menos, hasta ese golpe final que recompensó todo el esfuerzo. “No sé por qué tenemos esa mala costumbre de esperar a que
nos tengan contra las cuerdas para reaccionar”, hizo autocrítica Miotti. “Por
suerte, pudimos revertirlo. Tenemos que corregir eso, porque tenemos un año
largo por delante todavía”, completó el apertura, con la satisfacción del deber
cumplido. Ahora, a pensar en el Regional. (Fuente: La Gaceta)
